A las tres de la mañana del domingo estábamos en pie desayunando y preparándonos para partir. La idea era hacer cumbre antes de las 9.30, después la nieve se pone muy blanda y se producen desprendimientos de hielo y piedra. Como nos advirtió el Pato (instructor) el casco era imprescindible y, lo pude comprobar cuando íbamos subiendo la última parte de roca antes de la cumbre donde se desprendió gran cantidad de piedras de todos los tamaños. No me quedó otra que pegar el cuerpo contra la pared y protegerme con el casco recibiendo una gran carga de piedras. Definitívamente era imprescindible.
Salimos del campamento base a las 4 de la mañana y caminamos guiándonos por las luces de las frontales. A las 6.30 estábamos subiendo la primera canaleta entre un campo de "penitentes" que no hacía nada fácil avanzar, hasta que alcanzamos un portezuelo desde donde se ve el Cerro Diablo y un valle en dirección sur. La segunda canaleta antes de la cumbre es más corta y angosta pero tiene mayor pendiente asi que nos aseguramos con cuerda fija y subimos de a uno. Luego hay que escalar un sector de rocas sueltas, donde también nos aseguramos, de ahí se camina por una cornisa y en 30 minutos estábamos en la cumbre. Eran las 9.30 y éramos nueve los que alcanzábamos la cima del cerro diente del diablo. Veinte minutos en la cumbre y el descenso lo hicimos por la misma ruta, rapeleando en la zona de roca y la segunda canaleta.
A las 14hrs. estábamos de regreso en el campamento base. Comer algo, preparar las cosas y de vuelta a Santiago y Concepción.
2 comentarios:
los penitentes parecen olas de un mar turbulento, turbulenta es la nieve...hermosas fotos, entretenido relato
Tita
Publicar un comentario